martes, 31 de enero de 2012

Las madres no se ponen malas



Antes de que naciese Blanca no conocía esta realidad de las madres o súpermadres, y de su capacidad para no ponerse malas. ¿Qué no conocéis esa característica de las mamás? Seguro que sí, pero lo que ocurre es que no os habéis dado cuenta. Os voy a narrar los argumentos que no dejan lugar a dudas sobre mi gran descubrimiento:

Si se enferma el papá, se queda el día guardando camita, tomando caldito calentito, dejándose cuidar por su mujer, etc.

Si se ponen malitos los peques de la casa, se les cuida con todo el cariño del mundo y se les dan muchos mimitos hasta que se pongan buenos.

¿Y si la que enferma es la mamá? Pues en ese caso pasa las noches tiritando y dando la teta, pasa las tardes cuidando de los peques con un arsenal de pañuelos de papel y sigue con muchos de sus quehaceres diarios...¡¡Vamos, como si estuviese más sana que una pera!!

¿Y cómo podemos hacer todas esas cosas estando enfermas? Elemental queridas madres, he llegado a la irrefutable deducción de que en realidad no nos ponemos malas. Nos parece que tenemos mal cuerpo pero es sólo fruto de nuestra imaginación. Así que ya sabéis, la próxima vez que creáis estar enfermas no os preocupéis ;)

P.D. Tengo un gripazo con fiebre fruto de mi fructífera imaginación que quizás me esté haciendo escribir desvaríos...

2 comentarios:

  1. Ay, pobre! Ahora te toca a ti!
    Oye, qué arte los dibujos.
    Ponte buena prontito vale?
    un beso grande

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  2. El finde empecé yo y ya ha caído la peque. Vaya invierno llevamos! Los dibujos no son muy allá pero como me encanta dibujar...uno mis dos hobbies!
    Besos

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