Tiempo para mí

La maternidad trae consigo muchísimos cambios en la vida de los padres y, aunque todos son maravillosos, hay cosas que al final dejas de hacer. Dejas de programar tu vida porque no puedes saber cómo estará la peque dentro de dos horas, dejas de ser puntual porque siempre hay una caquita de último momento, dejas de salir por la noche porque estás muy cansada y, esto lo echaba de menos, dejas de tener tiempo para ti.

No creáis que me refiero a tiempo para salir con amigas, ir a la peluquería o hacer deporte...no! Prefiero mil veces estar con Blanca a hacer esas cosas. Me refiero más bien a tener un ratito para hacer algo que no sea relativo a la peque, a la casa, al perro y, en definitiva, a los demás.

Estas navidades me apetecía hacer unas galletas de canela y jengibre para llevarle a mi vecina, y no conseguía encontrar el momento para hacerlas.
¿Que por qué no disponía ni de media hora para hacer unas simples galletas?
Pues para explicarlo debería remontarme a principios de septiembre, cuando Blanca comenzó la guardería y los virus se mudaron a nuestra casa para no volverse a marchar.

Se suponía que cuando ella fuese a la guarde yo tendría tiempo para estudiar, limpiar, etc. pero ha sido justo al revés:
"Se pone malita - Se despierta cada media hora - Está penosa todo el día - No puedo hacer nada que no sea estar con ella"

Por fin esta semana ya está recuperada de males y, aunque está muy molesta porque le están saliendo los colmillos y las muelas, he vuelto a disponer de un ratito cuando se acuesta y he podido hacer las ansiadas galletas.
Parecerá una tontería pero desde septiembre no habíamos descansado ni un momento de encadenar enfermedades y ya no recordaba si esto era una mala racha o si era realmente tan agotador tener un bebé!
Las cosas no son tan complicadas ni agotadoras, las hemos complicado nosotros. Nos hemos dado de plazo hasta enero para decidir si la peque debe continuar o no en la guardería, pero estas vacaciones sin enfermedades están decantando la balanza hacia una única dirección.